Por Milagros Tamame y lara Bordenave
En el mes de agosto, durante los días 13,1 4 y 15, se realizó un congreso cristiano evangélico de jóvenes de entre 15 a 25 años pertenecientes a la Unión Evangélica Argentina (UEA). Después de 22 años, la sede fue la Iglesia de Tandil y se utilizó el espacio eclesiástico y las instalaciones del colegio “Estrella de Belén”. Asistieron alrededor de 190 jóvenes de las iglesias pertenecientes a la ALJUEA zona oeste: Tandil, Mar del Plata, La plata, Benito Juárez, Coronel Suárez, Lamadrid, Necochea, Villa Gesell y Tres Arroyos.
Bajo el concepto “La vida es Combate” Amilcar Matosian, pastor, predicador y escritor, dirigió las tres predicas del congreso. Él basó su mensaje en su último libro titulado de la misma manera, el cual se centró en la prevención del suicidio, en especial en los jóvenes. Utilizando referencias al boxeo, Amilcar mostró una gran metáfora sobre por qué es necesario “pelearla en la vida”.
El primer día se recibió a los jóvenes con un vaso térmico decorado como souvenir en una reunión donde se presentaron las actividades que se iban a realizar en los posteriores días. Durante este primer encuentro, el grupo de alabanza de Tandil deslumbró con su música con diversas canciones de adoración presentando un ambiente de mucha energía y juventud. Luego de esto, se llevó a cabo la primera prédica.

Souvenir del congreso, todos de diferentes colores con el sticker “la vida es combate”, lema del congreso.
Durante las noches, los visitantes se distribuyeron por las instalaciones del colegio durmiendo las mujeres en el sector primario, los pre-adolescentes en la planta del jardín de infantes y los hombres en el secundario. Todo el lugar estaba preparado y decorado con carteles, una estética urbana y una división por colores según las edades.
El segundo día dio inicio con un desayuno en el SUM del colegio con medialunas acompañadas de café o té con leche. Luego, alrededor de las 10 de la mañana se llevó a cabo la segunda prédica junto con otro momento de alabanza y adoración. Durante el resto de la tarde hubo momentos libres con el fin de que los participantes del congreso se conocieran. Aquí los jóvenes se divirtieron realizando torneos de vóley y ping pong. A mediados de la tarde se realizó la tercera y última prédica dando un cierre con respecto a las anteriores, además bajo la guía de una líder de Mar del Plata, se hizo una divertida clase de zumba.
Por la noche se liberó el espacio para que los invitados pudieran descansar para luego tener una actividad recreativa en el templo de la iglesia: un fogón cuya consigna era una vestimenta urbana. Aquí cada iglesia presentó un sketch, algunos utilizando como recurso la comedia (como por ejemplo la iglesia de Mar del Plata, la cual presentó un “noticiero” sobre lo que “era una ciudad de verdad”), otros presentaron canciones y juegos para realizar entre las diferentes iglesias. Las risas prevalecieron esa noche y así culminó el segundo día.

El tercer y último día comenzó al igual que el anterior con un desayuno, luego se realizó una “Salida de impacto” donde todos los integrantes del congreso recorrieron las calles de la ciudad por distintos caminos pegando carteles con el lema del congreso y un código QR con videos e información para prevenir el suicidio. El recorrido finalizó en El calvario donde se recordó el pasaje de Jesús hacia su crucifixión en el recorrido también turístico de la ciudad, el viacrucis. En este lugar, finalizaron con otro último momento de alabanza, esta vez en público.

Los organizadores fueron Silvina Czechowiez, Pablo Quiñones, Natalia Morales, Rominay Santiago García; miembros de distintos ministerios de la iglesia, dispuestos a brindar su ayuda y servir a Dios. Desde mediados de abril se encontraron preparando todo para finalmente concretar el congreso, pero cuando llegó la propuesta fue todo un desafío aceptar, cuenta Silvina Czechowiez y dice: “Nos quedamos todos perplejos, con muchas expectativas y aunque éramos pocos para organizarlo y teníamos mucho por hacer, contábamos con la ventaja de tener las instalaciones del colegio. Entonces tomamos la posta y así fue. Después de muchas horas de trabajo salió todo como esperábamos y espiritualmente recibí mucho más de lo que podía esperar”.