Por Sofía Rodríguez y Sol Suárez
Los alumnos de 5° y 6º año del Colegio Secundario Estrella de Belén se sumaron a la propuesta del Museo Histórico Nacional de escribir una carta dedicada a una persona del futuro y, así dejar testimonio de cómo se vive una pandemia, cuáles son sus gustos y sus sueños y todas las cosas que quieran contar.
La carta escrita por los alumnos es abierta y pensada para alguien que la leerá dentro de 200 años, dejando plasmada su experiencia sobre la pandemia del Covid-19. A lo largo de la carta, los estudiantes mencionaron aspectos personales como tu localidad, su edad y nombre. Además, rutinas antes y durante la pandemia, sus expectativas a futuro, cómo se sentían, cuáles son los síntomas del virus y cómo lidiamos el aislamiento, entre otras cosas.

Los alumnos escribieron cartas que quedrán guardadas en el Museo Histórico Nacional para que le lleguen a una persona dentro de 200 años.
El equipo educativo del Museo, integrado por Majo Grenni, Nicolás de Brea Dulcich y Mariel Mendez, nos brindó información sobre cómo nació esta propuesta: “Surgió desde el Área Educativa del Museo Histórico Nacional, a partir de reinventar los talleres presenciales que realizamos para niños/as en el museo al formato virtual en el contexto de COVID-19. La idea es que a partir de la escritura los/as participantes reflexionen sobre su protagonismo en un tiempo histórico tan particular, contando cómo es vivir una pandemia: sus impresiones, sus vivencias, sus cambios de hábitos, sus sueños, sus miedos”.
El alumno de 6° año, Manuel Poliszuk nos contó sobre su experiencia en el momento que escribió su carta: “Estuvo bueno, sirvió para reflexionar, te hace parar y pensar sobre todo lo que pasó este último año, que capaz que en el momento lo viviste sin pensar demasiado o que ya lo habías olvidado. Pero al tener que describirlo a alguien que no lo vivió tenés que recordar todo lo que pasó, paso a paso y vas recordando lo caótico y extraño que fue todo al principio. Así me pasó a mí, al menos”.
Antiguamente, se ha realizado una actividad similar llamada “Llegó carta del pasado” que estaba dirigida a grupos de chicos/as de 8 a 13 años y se los invitaba a descubrir aspectos de la Historia Argentina del siglo XIX a partir de la correspondencia privada; y a reflexionar sobre los cambios y continuidades en las formas de comunicación.
La coordinadora Di Marco, mencionó que las expectativas de esta nueva versión del taller son generar un espacio de reflexión, participación e intercambio entre el público, los/as educadores/as y el patrimonio del Museo en este tiempo de aislamiento. Difundir virtualmente parte de nuestro patrimonio y de una manera lúdica invitar a los/as participantes a que dejen en el museo un testimonio para otras generaciones de los tiempos que vivimos.
El proyecto estuvo enmarcado dentro de los espacios de Observatorio de Medios y de Taller de Producción en Lenguajes, coordinados por la profesora Virginia Himitian, quién será la encargada de enviar al Museo las cartas escritas por los estudiantes
Por otro lado, todos podemos ser parte, así que los invitamos a participar ustedes también de esta experiencia y mandar sus cartas a las redes sociales del Museo Histórico Nacional o por mail a [email protected].
Incluimos aquí algunos fragmentos de dos de esas cartas, escritas por Lucía Ahmad y Manuel Poliszuk:
Tandil, 18 de agosto de 2020
A partir del 20 de marzo la noticia que todos esperaban, pero no anhelaban, llegó y por todos los medios se difundió la primera parte del aislamiento social obligatorio que sería por unos días, que se convirtieron en meses, donde cada país, provincia y ciudad tiene sus propias reglas en este desastre.
Entonces, ¿Cómo lo estoy viviendo yo? Al principio fue todo muy tenso y con temor porque no sabíamos a lo que nos enfrentábamos. Encerrados, las preguntas y las preocupaciones empezaron a aparecer. La frustración de saber que todo lo que íbamos a perder no era en vano ya que desde hace 6 meses seguimos igual.
Lucía
La carta de Manuel
Estimado lector del futuro:
Lo que más cambió para mi fue el tema de la escuela. Nadie estaba preparado para una situación así, por lo que costó bastante acostumbrarse. Sí podría definir esta experiencia en dos palabras, estas serían Zoom y Classroom. La primera es la plataforma que utilizamos para las videollamadas con los profesores y la segunda es la plataforma donde nos asignan y dónde entregamos las tareas. Nuestra escolaridad transcurre por esos dos medios de comunicación. Es una modalidad totalmente diferente a la escuela presencial.
Encima, yo estoy cursando el último año de la secundaria. Acá, en Tandil, y en Argentina en general, hay un montón de actividades y cosas orientadas a estos alumnos. Es un año especial básicamente. A mí nunca me llamó la atención, pero la mayoría de los chicos esperan con ansias este año, y siento lástima por todo lo que se perdieron. Personalmente, me preocupa más lo que pasará el año que viene cuando deba empezar la universidad. No se sabe si seguirá con normalidad, si se empezará todo más tarde, si tendremos que volver algún tiempo a la secundaria, es todo un gran signo de interrogación por ahora.
Con esto me despido, no tengo mucho más para contar. En realidad sí, podría relatar infinidad de otras cosas pero no me gusta demasiado escribir. Se especula mucho con que en el futuro serán posibles los viajes en el tiempo. Si es así, querido lector, y si tiene ganas de conocer más de esta épica; lo invito a venir. Tal vez no al 2020 porque lo van a poner en cuarentena 15 días cuando llegue. Mejor venga en el 2021. Tráigase algo dulce que lo voy a estar esperando con unos mates. Saludos intertemporales”
Manuel